El viernes 21 de agosto la iglesia celebra la fiesta de San Pío X Papa.
Su papado discurre entre agosto de 1903 y agosto de 1914.
En su epitafio se lee: “Su tiara estaba formada por tres coronas: pobreza, humildad y bondad”.
Un Papa recordado por sus muestras de pobreza, humildad y caridad con los más necesitados, su firme deseo por mantener la doctrina de la Iglesia ante los errores teológicos y bíblicos y por aplicar importantes cambios.
Introdujo grandes reformas en la liturgia y facilitó la participación del pueblo en la celebración eucarística. Permitió la práctica de la comunión frecuente y fomentó el acceso a los niños a la Eucaristía. Promovió el estudio del catecismo, fundó el Instituto Bíblico y la ordenación del Derecho Canónico en el Código que conocemos. Preparó un texto de doctrina cristiana, el catecismo llamado ‘de Pío X’, que fue para muchos, una guía segura a la hora de aprender las verdades de la fe, por su lenguaje sencillo, claro y preciso, y por la eficacia expositiva.
Dentro de sus obras destaca su trabajo contra dos herejías en boga en esa época: MODERNISMO que tendía a querer renunciar a ciertos dogmas tradicionales con el fin de acomodarse a ciertas teorías científicas modernas; la cual desarmó estableciendo que los dogmas son inmutables y que la Iglesia si tiene voz y autoridad para dar normas de moral y, el JANSENISMO, que propagaba que la primera comunión se debía retrasar lo más posible; ante esto, decretó la autorización para que los niños pudieran recibir la comunión desde el momento en que entendían quien está en la Santa Hostia Consagrada.
En el motu proprio Tra le sollecitudini, afirma que el “verdadero espíritu cristiano tiene su primera e indispensable fuente en la participación activa en los sagrados misterios y en la oración pública y solemne de la Iglesia”.
Por eso recomendó acercarse a menudo a los sacramentos, favoreciendo la comunión diaria y anticipando la primera comunión de los niños, bien preparados, hacia los 7 años de edad, ‘cuando el niño comienza a tener uso de razón’.
El Papa San Pío X también creó un espacio para que personas necesitadas se refugiaran en el Vaticano tras el terremoto del 28 de diciembre de 1908 en Messina en la isla de Sicilia. Se permitió que se abriera el hospicio de Santa Marta para los refugiados y personas sin hogar.
Oración de Intercesión a San Pío X
Glorioso Papa de la Eucaristía, San Pío X, que te has empeñado en “restaurar todas las cosas en Cristo”. Obtenme un verdadero amor a Jesucristo, de tal manera que sólo pueda vivir por y para Él. Ayúdame a alcanzar un ardiente fervor y un sincero deseo de luchar por la santidad, y a poder aprovechar todas las riquezas que brinda la Sagrada Eucaristía. Por tu gran amor a María, madre y reina de todo lo creado, inflama mi corazón con una tierna y gran devoción a ella.
Bienaventurado modelo del sacerdocio, intercede para que cada vez haya más santos y dedicados sacerdotes, y se acrecienten las vocaciones religiosas. Disipa la confusión, el odio y la ansiedad, e inclina nuestros corazones a la paz y la concordia, a fin de que todas las naciones se coloquen bajo el dulce reinado de Jesucristo. Amén.
Entrada con contenidos tomados fundamentalmente de la web : www.aciprensa.com