Con estas palabras no pretendemos explicar ni suplantar el Evangelio diario, sino dar pautas para contemplar esta lectura, sabiendo que lo fundamental es leer, saborear y gustar internamente el Evangelio, descubriendo más hondamente como es el Señor.
Lunes semana VI del Tiempo de Pascua.
Lecturas: Jn 15, 26 – 16, 4
Un pasaje evangélico difícil: ¿Qué es dar testimonio de la verdad?
Permanecer con Jesus, igual que El permanece en el Padre, y estar abierto a su Espíritu, al Defensor que Él mismo envía.
No es fácil este pasaje evangélico. Parece que nos quiere dar ánimo en los momentos de dificultad. Y así es. Y, por supuesto que esos momentos vendrán.
Creo que nos podemos fijar un día más en como se revela Jesús:
Será Él quien nos envíe el Defensor, su propio Espíritu, desde el Padre, y será Él mismo quien de palabras y ánimo a aquellos que tienen con Él una profunda intimidad, le conocen, están con Él.
Mi experiencia en la vida (una vida muy cotidiana), es que las dificultades sin llamarlas, vienen. Y agotan. ¿A qué nos llama hoy este Evangelio? A vivirlas desde la unión con el Señor. Él no nos va a quitar esas dificultades. Pero Él, y solo Él, nos puede dar fortaleza y luz para vivirlas desde la esperanza y la fe. Es vivirlas de otra forma. Estemos unidos con Él.
José Luis, vuestro Párroco