Con estas palabras no pretendemos explicar ni suplantar el Evangelio diario, sino dar pautas para contemplar esta lectura, sabiendo que lo fundamental es leer, saborear y gustar internamente el Evangelio, descubriendo más hondamente como es el Señor.
Sábado semana XVIII del Tiempo Ordinario: Mt 17, 14-20
Ante un fracaso por parte de los discípulos, Jesús, aunque se lamenta por su falta de fe, acoge, hace, sana y enseña el camino a seguir: buscar tener fe.
El pasaje evangélico de hoy comienza con una persona que, desesperado busca al Señor. Tiene mucha angustia, casi no sabe a quién o dónde acudir. Quiere profundamente a su niño, se postra ante el Maestro, le pide, y el Señor ante esta angustia, obra curando y sanando.
Jesús, aún cuando vea la limitación y mediocridad de sus discípulos, siempre actúa sanando. Y luego ante el interrogante de estos, les muestra el camino: tener fe.
Hoy se nos invita a contemplar al Señor en su compasión hacia este hombre, y después en su orientación hacia por donde caminar, la búsqueda de la fe.
Estemos con Él.
José Luis, vuestro Párroco