Para leer el Evangelio: lunes 13 septiembre 2021

Con estas palabras no pretendemos explicar ni suplantar el Evangelio diario, sino dar pautas para contemplar esta lectura, sabiendo que lo fundamental es leer, saborear y gustar internamente el Evangelio, descubriendo más hondamente como es el Señor.

Lunes semana XXIV del Tiempo Ordinario.
Lecturas: Lc 7, 1-10. 

Me gusta hoy contemplar la actitud de Jesús en mitad de la gente: habla y enseña, camina y está en Cafarnaum, una ciudad, un lugar donde habitan y viven personas, atiende a unos enviados por el centurión, primero unos ancianos del pueblo, y va con ellos, luego a unos amigos, y al final se admira por la confianza y humildad de este hombre, el centurión.

Encontramos a un Dios que no busca adoración ni pleitesía, incienso y alabanzas, sino a un Dios que se mete en lo más hondo de la historia humana, se deja tocar por las personas, las atiende y escucha, va con ella, y sana y salva.

Hoy podíamos visualizar este relato, observar las acciones de Jesús, y dejarnos «prender» por este Dios realmente todo amor: nadie (ni tan siquiera un pagano, oficial y mando de las fuerzas de ocupación, militar, hombre dado a utilizar la fuerza), absolutamente nadie, está fuera del amor de Dios.

Estemos con Él.

José Luis, vuestro Párroco