Con estas palabras no pretendemos explicar ni suplantar el Evangelio diario, sino dar pautas para contemplar esta lectura, sabiendo que lo fundamental es leer, saborear y gustar internamente el Evangelio, descubriendo más hondamente como es el Señor.
Lunes semana XXIX del Tiempo Ordinario.
Lecturas: Lc 10, 1-9.
San Lucas Evangelista.
Al recordar hoy a San Lucas, me gustaría fijarme en dos detalles del Evangelio de hoy.
Jesús sabe muy bien que habita «entre lobos». Aún así, Él mismo va por el mundo «deseando la paz», y recordándonos «está cerca el Reino de Dios».
A pesar de las dificultades, que incluso le pueden llevar hasta la muerte, Jesús sigue siendo portador de paz y de vida (sana a los enfermos), y nos recuerda de continuo el proyecto de Dios, su reino, su gran deseo de que el mundo sea una gran comunidad de hijos suyos y hermanos.
Contemplemos hoy a Jesús así: viendo cómo es, y sintiendo que su misión Él nos la propone a cada uno de nosotros. A ejemplo de Lucas, hoy nos invita a ser evangelistas: conocerle, tener intimidad con Él, y anunciarle con obras y palabras.
Leamos este Evangelio y en el silencio, dejémonos embargar por él.
José Luis, vuestro Párroco