Para leer el Evangelio: lunes 13 diciembre 2021

Con estas palabras no pretendemos explicar ni suplantar el Evangelio diario, sino dar pautas para contemplar esta lectura, sabiendo que lo fundamental es leer, saborear y gustar internamente el Evangelio, descubriendo más hondamente como es el Señor.

Lunes de la semana III del Tiempo de Adviento. Ciclo C.
Lecturas:
Mt 21, 23-27. 

Nos presenta hoy Mateo a Jesús enseñando, y además, enseñando en el templo. Tal vez nos quiere indicar algo: el lugar del Señor es un lugar muy especial.

Y en este contexto sagrado, además, dos grupos de gente muy significativos le preguntan: ¿cuál es tu autoridad?

Creo que hoy nos podemos plantear lo mismo cada uno: ¿qué autoridad tiene sobre mi el Señor?

No una autoridad desde la legalidad o lo canónico, sino una autoridad desde lo vital.

Como tantas veces he presentado, para mi el Señor tiene la autoridad de la vida: todo nace en Él y todo se mantiene en Él. Él es la vida, es la verdad, es el manantial en el cual nos podemos sumergir para tener vida y tener vida abundante.

Los sacerdotes del templo y los ancianos o senadores, los aristócratas del mundo judío de entonces, se acercan al Señor de forma poco limpia. E incluso entre ellos hablan, y caen en la cuenta de que no actúan honradamente.

Cada uno de nosotros, ¿cómo nos acercamos a Jesús? ¿cuáles son nuestras actitudes? ¿le voy reconociendo como el Señor de la vida? ¿pongo en Él mis inquietudes y esperanzas?

Él está deseando que me acerque, que vaya a Él, que me inmerse en Él.

Estemos con Él.

José Luis, vuestro Párroco