Domingo de Pentecostés (ciclo C).
Lecturas: Hch 2, 1-11, Sal 103, 1 Cor 12, 3b-7. 12-13, Jn 20, 19-23.
Culmina el tiempo de Pascua con esta solemnidad de Pentecostés: el Señor nos invita a saborear y gustar su propio ser, su propio Espíritu.
Las lecturas hoy nos van conduciendo a contemplar este misterio: por nuestro interior transcurre el propio ser de nuestro Dios. Si sondeamos nuestro interior, podemos descubrir que el Señor habita en nosotros. San Agustín es experto en sentir esa presencia. Y como él, todos los grandes místicos. Entrar en nuestro interior.
Podemos ir leyendo despacio cada lectura bíblica: Dios que unifica a las personas, nos hace posible estar abiertas a los demás y entendernos; que nos conduce a formar una nueva humanidad, una nueva comunidad, una nueva Iglesia, con múltiples carismas; Dios que nos da de lo que sale de su interior, su aliento, su ser, su vida.
Estemos con el Señor, y pidámosle vivir abiertos a Él.
José Luis, vuestro Párroco