Para leer el Evangelio: lunes 19 septiembre 2022

Con estas palabras no pretendemos explicar ni suplantar el Evangelio diario, sino dar pautas para contemplar esta lectura, sabiendo que lo fundamental es leer, saborear y gustar internamente el Evangelio, descubriendo más hondamente como es el Señor.

Lunes XXV del Tiempo Ordinario. ‎
‎Lecturas: Lc 8, 16-18.‎

Hoy el Señor se nos revela como la luz.

Mediante el uso del lenguaje parabólico y como dando consejos, Jesús se manifiesta como la luz para el mundo, para nosotros.

Él es auténticamente la luz para nuestra vida. Pero, ¿qué significa esa metáfora? Debemos ir más allá de la mera estética de las palabras.

El Señor con su actuar nos va mostrando, iluminando, el camino por donde podemos transitar. A la vez, tener experiencia de Él, vivir el encuentro con Él, nos ayuda a conocernos a nosotros mismos mejor, conocer nuestras capacidades, aceptar nuestras lagunas, y caminar con la seguridad de que estamos en las manos del Padre. Esta es una gran luz.

El Señor Jesús es nuestra luz porque nos va mostrando como caminar, quién somos, y hacia donde dirigirnos. Él es la luz puesta en lo alto para que podamos discernir, y avanzar.

Hoy podemos leer este Evangelio, y pedirle «se, Señor, mi luz y mi fuerza, amén».
Estemos con Él.

José Luis, vuestro Párroco