Con estas palabras no pretendemos explicar ni suplantar el Evangelio diario, sino dar pautas para contemplar esta lectura, sabiendo que lo fundamental es leer, saborear y gustar internamente el Evangelio, descubriendo más hondamente como es el Señor.
Sábado I del Tiempo Ordinario.
Lecturas: Mc 2, 13-17
Me gustaría quedarme en un pequeño detalle de esta lectura: «estando en su casa».
Es admirable este texto: el paso por delante de la mesa de los impuestos, la llamada, la respuesta de Jesús a los «buenos»…
Pero me gustaría quedarme en este detalle: «estando en su casa».
Jesús se hace presente en lo más hondo de nuestra vida, en nuestra casa, en nuestro ser. Después de la llamada, o vocación, se hace presente en «su casa», su lugar más íntimo. Y aquí está, en lo más íntimo de nuestra vida. E igual que en la vida de Levi, nos llena de vida, de paz, de amor…
Sintamos que estamos con El. Y Él en nosotros. Estemos con Él.
José Luis, vuestro Párroco