Con estas palabras no pretendemos explicar ni suplantar el Evangelio diario, sino dar pautas para contemplar esta lectura, sabiendo que lo fundamental es leer, saborear y gustar internamente el Evangelio, descubriendo más hondamente como es el Señor.
Jueves de la IV semana de Pascua (Ciclo A).
Lecturas: Jn 13, 16-20.
Es curioso que justo en Pascua leamos parte de las palabras de Jesús en la cena. La liturgia desea presentarnos como son los sentimientos de Jesús de forma sosegada, contemplativa…
Hoy podemos descubrir a Jesús unido al Padre muy intensamente, pero también unido a aquellos que son enviados por El. Tanto que estos «portan» al mismo Padre de Jesús.
Nos podemos sentir «portadores» de Dios. En la medida en que estamos unidos al Señor, estamos unidos al Padre.
Hoy podemos contemplar así a Jesús, unido al Padre, unido a nosotros, unidos por el amor y la gracia.
Estemos con Jesús, sintamos muy cerca al Padre.
José Luis, vuestro Párroco