Con estas palabras no pretendemos explicar ni suplantar el Evangelio diario, sino dar pautas para contemplar esta lectura, sabiendo que lo fundamental es leer, saborear y gustar internamente el Evangelio, descubriendo más hondamente como es el Señor.
Sábado semana XVI del Tiempo Ordinario. Ciclo A
Lecturas: Mt 13, 24-30.
De nuevo la parábola de la cizaña.
Me gustaría detenerme en como define Jesús al propietario del campo: un hombre que siembra buena semilla, y que no tiene inconveniente en esperar. Bondad y paciencia.
Esto es lo que caracteriza a Dios, y a Jesús: nunca deja de sembrar buena semilla, y aguarda con tiempo a que se de fruto. No le importa esperar.
Nuestra salvación está en la bondad y paciencia de nuestro Dios.
Hoy podemos contemplar así al Señor: está aguardandonos con una infinita bondad. Pidamos aprender de su bondad y su paciencia.
Estemos con El.
José Luis, vuestro Párroco