Con estas palabras no pretendemos explicar ni suplantar el Evangelio diario, sino dar pautas para contemplar esta lectura, sabiendo que lo fundamental es leer, saborear y gustar internamente el Evangelio, descubriendo más hondamente como es el Señor.
Miércoles semana XXI del Tiempo Ordinario. Ciclo A
Lecturas: Mt 23, 27-32.
Jesús hoy se manifiesta como el hombre de la coherencia: lo que vemos por fuera es lo que existe por dentro.
Cómo Él mismo nos dice, no es como un sepulcro ornamentado, pulido, brillante, pero por dentro lleno de huesos podridos.
Su interior está en franca armonía con su exterior. Su palabra y su obra van unidas firmemente.
Se aleja del victimismo y de la lástima: no está de acuerdo de los que se quejan de antiguos crímenes, pero en su momento actual no viven la justicia y el amor. No caerá en una crítica fácil y vacía, sino que se exige autenticidad entre sus palabras y su vida.
Hoy podemos contemplar así a Jesús: es el Señor de la verdad y de la coherencia.
Estemos con Él.
José Luis, vuestro Párroco