Con estas palabras no pretendemos explicar ni suplantar el Evangelio diario, sino dar pautas para contemplar esta lectura, sabiendo que lo fundamental es leer, saborear y gustar internamente el Evangelio, descubriendo más hondamente como es el Señor.
Lunes semana I del Tiempo de Adviento. Ciclo B.
Lecturas: Mt 8, 5-11.
Me parece entrañable la postura de Jesús.
Ante Él viene un centurión: un oficial, un mando, de fuerzas extranjeras de ocupación, pagano, extranjero, militar, es decir, que impone su voluntad por la fuerza.
Pero ante este hombre que se le acerca, Jesús se situa acogiendo, escuchando, dispuesto a ir con él.
Y ante la confianza y la fe de este hombre, Jesús se conmueve… y se deja vencer.
Entonces expone algo muy íntimo del corazón de Dios: la vida es para toda persona que confíe en Él. No valen los títulos, ni el «pedigrí», sino la sencillez e integridad de corazón.
Podemos hoy visualizar este encuentro, y contemplar como Jesús se situa ante este hombre…y nos podemos dejar conmover por Él.
José Luis, vuestro Párroco