Con estas palabras no pretendemos explicar ni suplantar el Evangelio diario, sino dar pautas para contemplar esta lectura, sabiendo que lo fundamental es leer, saborear y gustar internamente el Evangelio, descubriendo más hondamente como es el Señor.
Miércoles de la XV semana del Tiempo Ordinario (Ciclo B).
Lecturas: Mt 11, 25-27.
Hoy Jesús se nos revela como el hombre que vive una profunda actitud de acción de gracias al Padre.
Descubre en el Padre a un Dios que ama, es Padre, y que prefiere la sencillez a la apariencia.
Descubre también en el Padre una profunda unión con Él, y se propone como camino para que podamos llegar a Él, llegar al más profundo sentido y fuente de la vida.
Hoy podemos leer despacio este Evangelio, oírlo en labios de Jesús, y saborearlo para llegar a sus sentimientos más profundos.
Estemos con Él.
José Luis, vuestro Párroco