Con estas palabras no pretendemos explicar ni suplantar el Evangelio diario, sino dar pautas para contemplar esta lectura, sabiendo que lo fundamental es leer, saborear y gustar internamente el Evangelio, descubriendo más hondamente como es el Señor.
Lunes. Feria de Navidad. Ciclo C
Solemnidad de la Epifanía del Señor
Lecturas: Mt 2, 1-12.
Desde luego que este texto es admirable por su contenido. La fiesta de la Epifanía del Señor es entrañable: Dios viene y nace para todos.
Literalmente la Palabra epifanía significa «manifestación de Dios para los de fuera», para los no judios. El Señor no se encierra en un pueblo o raza, viene para todos, para toda la humanidad. Es curioso que este relato lo narre Mateo, el Evangelista más judaizante.
Y es entrañable toda la narración: unos no judíos, unos sabios, buscan en mitad de la noche, cuando salen las estrellas. Buscan y buscan, y se equivocan bastante, ahora bien, no dejan de buscar. Y encuentran.
Hoy el Señor nos llama a buscar aunque parezca que estamos en la oscuridad; a buscar aunque nos equivoquemos; y a buscar, aunque solo atisbemos pequeños vestigios, pequeñas luces o estrellas.
El Señor se manifiesta a través de esos pequeños vestigios. Y Él está.