Con estas palabras no pretendemos explicar ni suplantar el Evangelio diario, sino dar pautas para contemplar esta lectura, sabiendo que lo fundamental es leer, saborear y gustar internamente el Evangelio, descubriendo más hondamente como es el Señor.
Jueves de la semana XV del Tiempo Ordinario (Ciclo C).
Lecturas: Mt 11, 28-30.
Unido al texto de ayer, este fragmento evangélico es para leer, releer, y admirar.
Me gustaría saborear la primera parte: «venid a mi todos los cansados…»
Con frecuencia andamos cansados y agobiados, angustiados…qué distinto sería todo si supiéramos ir al Señor…
Y me gustaría admirar adelante de una imagen de Jesús la segunda parte de este Evangelio: «Soy manso y humilde» . Descubrir a nuestro Señor como es, pacífico y cercano, entrañablemente cercano…
Os decía, descubrir a Jesús un día más, estar con Él…
José Luis, vuestro Párroco