Para leer el Evangelio: domingo 20 julio 2025

Con estas palabras no pretendemos explicar ni suplantar el Evangelio diario, sino dar pautas para contemplar esta lectura, sabiendo que lo fundamental es leer, saborear y gustar internamente el Evangelio, descubriendo más hondamente como es el Señor.

Domingo XVI del Tiempo Ordinario (Ciclo C).
Lecturas: Lc 10, 38-42.

Hay un detalle insignificante, pero precioso con el qué tal vez podamos comenzar a contemplar este pasaje evangelico.

Nos cuenta Lucas que «…una mujer lo recibió en su casa…»

Es sorprendente como parece que Dios pide, mendiga, nuestra amistad: Jesús se deja acoger, y entra en «nuestra casa», en nuestra vida. Cuánto significa nuestra casa en nosotros: la casa es el lugar donde somos, donde nos podemos mostrar como somos, donde no tenemos ningún papel o roll que representar, ni ningún trabajo remunerado que nos dé un beneficio para vivir: es donde somos.

Jesús se deja acoger en la casa de estas mujeres.

Y justamente aquí señala la importancia de la escucha. La escucha a Él, la escucha a los demás…

Hoy podemos contemplar así al Maestro: un Dios que se «mete» en nuestra casa, en nuestro ser, que nos invita a estar con Él, simplemente a estar, y desea escuchar y ser escuchado, simplemente desea «estar».

José Luis, vuestro Párroco