Martes IV de Pascua (ciclo C).
Lecturas: Jn 10, 22-30.
Es curiosa la frase de los judíos: ¿hasta cuando nos vas a tener en suspenso?
¿Cómo sería Jesús que provoca tal interpelación? ¿Qué nos provoca hoy a nosotros?
Hoy al responder a aquellos judíos, se nos revela a nosotros como quién une vida y palabra, sus obras son su mejor carta de identidad, que está unido íntimamente a aquellos que se le acercan, las conoce, que da vida, y está tan unido al Padre que es uno con Él. Él mismo es Dios.
Podemos leer despacio este Evangelio, y contemplar así al Maestro: nos da vida y nos conoce; en definitiva, es Dios. Acojámosle así en nuestra vida. Estemos con Él.
José Luis, vuestro Párroco