Para leer el Evangelio: domingo 23 octubre 2022

Con estas palabras no pretendemos explicar ni suplantar el Evangelio diario, sino dar pautas para contemplar esta lectura, sabiendo que lo fundamental es leer, saborear y gustar internamente el Evangelio, descubriendo más hondamente como es el Señor.

Domingo XXX del Tiempo Ordinario. ‎
‎Lecturas: Si 35, 12-14.16-18; Sal 33; 2 Tim 4, 6-8. 16-18; Lc 18, 9-14.‎

Jesús hoy se revela como el Señor de la humildad y la confianza.

Creo que al leer la parábola, claramente identificamos al Señor con la actitud del publicano, con cómo este hombre se acerca a Dios: humilde y confiado, reconociendo quién es realmente. Nada más lejos de Jesús que la actitud del fariseo. En sus formas y en su fondo, en su soberbia y hasta en lo que «esconde».

El libro del Eclesiástico nos revela lo mismo: cómo acercarse a Dios, que acoge a aquel que humilde y pobremente se acerca a Él. E igual repetimos con el salmo: «si el afligido invoca al Señor…»

Pablo habla de cómo toda su vida ha sido un acercarse a Dios: humilde y confiado «hasta en el tribunal», donde estaba solo y desamparado, pero Dios fue su fuerza y su auxilio.

Hoy Jesús se presenta como Aquel que se acerca a Dios, humilde y confiado, pero que por ello se siente reconciliado, como el publicano. Podemos hoy leer estas lecturas, y visionar a Jesús, sentir como es su estilo.

Estemos con Él, que habita en nosotros, y pidámosle que nos enseñe a acercarnos al Padre.

José Luis, vuestro Párroco