El día 4 de mayo del año 2003, ante una abarrotada plaza de Colón, en un viaje exprés de 31 horas, el Papa san Juan Pablo II canonizaba a cinco españoles. Entre ellos san José María Rubio, SJ, el apóstol de Madrid. Durante la homilía de la eucaristía, el Santo Padre alabó del santo su «entrega total al apostolado de la Palabra y de los sacramentos, dedicando largas horas al confesionario y dirigiendo numerosas tandas de ejercicios espirituales».
Veinte años después, la iglesia de Madrid sigue vinculada a su santo apóstol, y celebrando su fiesta. Es el caso de la parroquia San José María Rubio, del barrio madrileño del Cañaveral. Desde hoy hasta el próximo domingo, la parroquia se entrega a festejar la vida del santo y protector de su parroquia: Misas solemnes, encuentros comunitarios y actividades lúdicas y deportivas tendrán lugar estos días abiertos también para el barrio.
Los restos del santo originario de Dalías (Almería) se encuentran en la parroquia San Francisco de Borja de Madrid. Hasta allí numerosas personas se acercan aún hoy a venerar al santo y presentarle sus oraciones pidiendo por su intercensión. Además, la labor pastoral con los más necesitados que llevaba a cabo el santo jesuita tiene su eco en el Centro Santo Padre Rubio, con sede en la misma parroquia y que pertenece a la Fundación San Juan del Castillo – Pueblos Unidos y que centra su trabajo en la acogida de personas migrantes.
Precisamente en la parroquia San Francisco de Borja hoy también se celebra a san José María Rubio: «Antes de la misa de las 13 horas habra exposición del santísimo-oración y procesión por el claustro organizado por las adoradoras presenciales», cuentan. Además, la iglesia estará abierta todo el día para poder visitar la tumba del Padre Rubio. También se celebrará su memoria en todas las Eucaristías del día.
Fran Otero, redactor jefe del semanario Alfa y Omega de la Diócesis de Madrid también rinde su particular homenaje al santo jesuita en el número de esta semana. Con el título «4 de mayo: san José María Rubio. El «apóstol de Madrid» que hizo un antimilagro», el periodista hace un recorrido por alguno de los momentos más llamativos de su vida.
San José María Rubio, SJ
San José María Rubio nace en Dalías, provincia de Almería, en el año 1864. Su formación para el sacerdocio la empieza en Granada, llegando más tarde a la capital de España. Ordenado sacerdote en Madrid, sus primeros destinos pastorales fueron Chinchón y Estremera. Profesor en el seminario madrileño, llegaría a ejercer varios años como Notario de la Curia Diocesana. Pasados los 40 años, es llamado a servir a Dios desde la Compañía de Jesús. Tampoco faltó en su trayectoria la atención a los más pobres y necesitados, descubriendo en ellos la presencia del rostro de Dios. San José María Rubio muere en 1919, siendo beatificado y canonizado por San Juan Pablo II