Con estas palabras no pretendemos explicar ni suplantar el Evangelio diario, sino dar pautas para contemplar esta lectura, sabiendo que lo fundamental es leer, saborear y gustar internamente el Evangelio, descubriendo más hondamente como es el Señor.
Miércoles de la V semana de Pascua (Ciclo B).
Lecturas: Jn 15, 1-8.
Me gustaría hoy resaltar dos detalles de este Evangelio.
Hoy el Señor nos motiva a estar unidos a Él, a permanecer en Él. Solo Él es la fuente de la vida.
También nos recuerda: sin mi, no podéis hacer nada.
Efectivamente, podemos hoy contemplar así a Jesús: El es la fuente de la vida; estemos unidos a Él, ya que sin Él nada podemos hacer.
Vivamos con Él.
José Luis, vuestro Párroco