Con estas palabras no pretendemos explicar ni suplantar el Evangelio diario, sino dar pautas para contemplar esta lectura, sabiendo que lo fundamental es leer, saborear y gustar internamente el Evangelio, descubriendo más hondamente como es el Señor.
Domingo de la VIII semana de Pascua (Ciclo B).
Domingo de Pentecostés.
Lecturas: Jn 20, 19-23.
Jesus hoy se nos revela como el dador del Espíritu. Su aliento, lo que le sale de más adentro, su mayor intimidad, es su Espíritu, y es lo que nos dona.
Hoy, en esta fiesta de Pentecostés, podemos así contemplar al Maestro: es Aquel que nos da su intimidad, Aquel que nos da el amor.
Podemos contemplar hoy el relato que nos cuenta el Evangelista, y pedirle al Señor que nos abra realmente a la acción de su Espíritu.
José Luis, vuestro Párroco