Con estas palabras no pretendemos explicar ni suplantar el Evangelio diario, sino dar pautas para contemplar esta lectura, sabiendo que lo fundamental es leer, saborear y gustar internamente el Evangelio, descubriendo más hondamente como es el Señor.
Sábado de la XX semana del Tiempo Ordinario (Ciclo B).
Día 24 de agosto, San Bartolomé, Apóstol.
Lecturas: Jn 1, 45-51.
El encuentro de Jesús con Natanael, o Bartolomé, es intenso.
Por un lado, otro discípulo le va a presentar, Felipe. Sin embargo, algo falla: prejuicios, falta de experiencia de cercanía…
En el encuentro con Jesús es cuando Bartolomé cae en la cuenta de con quién habla: su mirada, sus palabras, sus gestos…
Hoy Jesús se nos revela como el Mesías, el que mira el corazón, el que conoce más íntimo de cada uno. Igual que conocía al discípulo, nos conoce a cada persona.
Hoy podemos visualizar este encuentro, escuchar a los tres personajes que intervienen, y probar está experiencia: dejar que el Señor nos mire…¿Qué nos dice, cómo nos sentimos?
Estemos con Él.
José Luis, vuestro Párroco