Con estas palabras no pretendemos explicar ni suplantar el Evangelio diario, sino dar pautas para contemplar esta lectura, sabiendo que lo fundamental es leer, saborear y gustar internamente el Evangelio, descubriendo más hondamente como es el Señor.
Jueves semana XII del Tiempo Ordinario.
Solemnidad de la Natividad de San Juan Bautista
Lecturas: Lc 1, 57-66.80
Hoy nos cuenta el Evangelio como Dios está cercano a los que le buscan: dos personas justas que caminan buscándole, tomando Él mismo la iniciativa.
A dos personas sin hijos, estériles, gran afrenta para aquel momento, Dios les concede concebir, rompiendo su oprobio, pero también con la finalidad de llamar al pueblo entero a la conversión, preparándole para acoger la salvación de Dios.
Nuevamente, Dios actúa para traer la salvación. Digamos que siempre es el actuar de Dios. Por ello con nuestro Dios no podemos tener una relación de temor, sino de amor y cariño, como un hijo con su padre, o con su madre.
Hoy podemos contemplar y leer este Evangelio, viendo la iniciativa de Dios que siempre trae salvación, rompiendo aquello que oprime al ser humano.
En silencio, contemplemos este acontecimiento y contemplemos la acción de nuestro Dios.
José Luis, vuestro Párroco