Para leer el Evangelio: sábado 12 diciembre 2020

Con estas palabras no pretendemos explicar ni suplantar el Evangelio diario, sino dar pautas para contemplar esta lectura, sabiendo que lo fundamental es leer, saborear y gustar internamente el Evangelio, descubriendo más hondamente como es el Señor.

Sábado II del Tiempo  de Adviento.  Mateo 17, 10-13

Vuelve el Señor a identificar a Juan Bautista con Elías, con lo que ello significa: su tarea es invitar a la vuelta a la Dios, a preparar el camino al Señor, a acoger a nuestro Dios que viene.

Unido a ello, está la conciencia clara de la misión del Señor aquí en este mundo: vivir el amor, la entrega radical. No es que Jesús busque el dolor, sino que Él sabe bien que igual que muchos no han acogido a Juan, ni acogieron la propuesta de Elías hace ya siglos, habrá muchos que no le acojan a Él. Y esto vale para toda la historia.

El amor, la entrega de la vida por amor, es lo propio del ser de nuestro Dios, y tal vez su propuesta, anunciar al Dios Padre y Madre para quien todos somos hijos, y por ello hermanos e iguales, será lo que le pueda llevar hasta la muerte.
Y, sin embargo, Jesús sigue caminando y avanzando. Acoger al Señor, vivir el Adviento, es acoger su proyecto, y vivir como Juan y como Elías, preparando su camino. Es también, vivir como Jesús, vivir el proyecto del Padre, aunque conlleve dificultades. Por eso, identificarnos con el Maestro, el hombre lleno de Dios, es el único camino para vivir como Él.
Contemplemos a Jesús, y pidamos estar y ser como Él, llenos de Dios

José Luis, vuestro Párroco