¿BAUTIZAR A LOS NIÑOS?
La fiesta del Bautismo del Señor que concluye el tiempo de Navidad, es Epifanía del comienzo de la vida pública de Jesús y de su ministerio mesiánico. Jesús de Nazaret bajó al Jordán como si fuese un pecador («compartió en todo nuestra condición humana menos en el pecado»), para santificar el agua y salir de ella revelando su divinidad y el misterio del nuevo bautismo. El espíritu de Dios descendió sobre él y la voz del Padre se hizo oír desde el cielo para presentarle como su Hijo amado.
El Bautismo es puerta de la vida y del reino, Sacramento de la fe, signo de incorporación a la Iglesia, vínculo sacramental indeleble, baño de regeneración que nos hace hijos de Dios. El Bautismo es el gran compromiso que puede adquirir el hombre. Y los compromisos…
Tomado de la “Hoja” llamada HOY DOMINGO que nos ofrecen varios sacerdotes desde el Arzobispado de Madrid en su servicio de liturgia. Para leer el texto completo y más información para la semana, hay que entrar en este vínculo: hoja hoy domingo para este día