Con estas palabras no pretendemos explicar ni suplantar el Evangelio diario, sino dar pautas para contemplar esta lectura, sabiendo que lo fundamental es leer, saborear y gustar internamente el Evangelio, descubriendo más hondamente como es el Señor.
Domingo. Bautismo del Señor. Ciclo B
Lecturas: Mc 1, 7-11.
Me gustaría contemplar hoy dos aspectos de este texto evangélico, aunque vaya a ir de delante hacia atras.
Lo primero es que es el mismo Padre quien presenta al Hijo: «Tú eres mi Hijo amado, en ti me complazco».
Realmente la fiesta del Bautismo de Cristo es la presentación por parte de Dios sobre quién es Jesús.
Lo segundo es la afirmación del Bautista: «os bautizará con Espíritu Santo» .
Hoy se nos invita a contemplar así a Jesús: el Hijo amado del Padre, hombre lleno de Espíritu de Dios.
Podemos leer despacio este texto, imaginar al Señor, y contemplar esas palabras: Hijo amado del Padre. Pidamosle que nos llene con su Espíritu.
Estemos con Él.