Con estas palabras no pretendemos explicar ni suplantar el Evangelio diario, sino dar pautas para contemplar esta lectura, sabiendo que lo fundamental es leer, saborear y gustar internamente el Evangelio, descubriendo más hondamente como es el Señor.
Viernes de la VII semana de Pascua (Ciclo B).
Lecturas: Jn 21, 15-19.
Es curioso hay como se revela el Señor: parece que está mendigando amor y cariño. O, más bien, reafirmando el amor de Pedro.
Pedro ha negado tres veces a Jesús. Hoy se manifiesta Jesús deseando ser amado. Por encima de la pobreza moral de Pedro, o su debilidad humana, está el amor y el deseo de amor de Jesús, de Dios mismo.
Hoy Jesús se nos revela así: el Dios deseando amar y ser amado.
Podemos hoy visualizar así al Maestro, en su encuentro con Pedro, y escuchar de su boca esas preguntas, refiriéndose a cada uno de nosotros: está deseando que le digamos que «te quiero».
Estemos con Él.
José Luis, vuestro Párroco