Lunes III de Pascua (ciclo C).
Lecturas: Jn 6, 22-29.
Parece un texto de transición, entre la multiplicación de los panes, y el discurso del pan de vida que va a venir enseguida.
Sin embargo en estas palabras podemos encontrar la revelación de quién es Jesús: el alimento que no pasa.
Es importante ver las últimas palabras del Maestro: nos llama a la fe: «creed en Aquel que el Padre ha enviado».
En la vida cotidiana vemos muchos signos y señales de Dios. A veces se nos pasan desapercibidas, fruto del momento en que estamos. Y sin embargo, si fuéramos capaces de mirar la realidad con otros otros ojos, caeríamos en la cuenta de que muchas cosas nos remiten a Dios. Saliendo de nuestra mirada puramente cientifista, buscando mirar «más allá». Nos daríamos cuenta de la presencia de Dios. Por eso tienen importancia esas palabras del Señor: «creed en Aquel que el Padre ha enviado»; en definitiva, fiarnos de Jesús. Más allá de la mirada, repito, puramente sensorial. Acoger al Señor.
Leamos este Evangelio, y estemos con Él.
José Luis, vuestro Párroco