Con estas palabras no pretendemos explicar ni suplantar el Evangelio diario, sino dar pautas para contemplar esta lectura, sabiendo que lo fundamental es leer, saborear y gustar internamente el Evangelio, descubriendo más hondamente como es el Señor.
Lunes de la IV semana de Pascua (Ciclo B).
Lecturas: Jn 10, 1-10.
Hay dos claves en este Evangelio, claves para vivir.
El Señor sigue insistiendo en el conocimiento de Dios. Conocer en la Biblia significa tener una relación afectiva y amorosa intensa. El Señor nos conoce, nos ama, y nos llama por nuestro nombre: sabe quién somos.
Jesús además se presenta como la puerta: la puerta a la vida, la puerta a la plenitud. Quién entra por Él, quien vive en Él, va viviendo en la plenitud, en la vida auténtica.
Hoy podemos leer este pasaje evangélico, y contemplar asi a Jesús: el Dios que nos ama intensamente, y nos llama a entrar en Él , a vivir en Él.
Estemos con Él.
José Luis, vuestro Párroco