Con estas palabras no pretendemos explicar ni suplantar el Evangelio diario, sino dar pautas para contemplar esta lectura, sabiendo que lo fundamental es leer, saborear y gustar internamente el Evangelio, descubriendo más hondamente como es el Señor.
Jueves XXVIII del Tiempo Ordinario.
Lecturas: Lc 11, 47-54.
Jesús hoy hace unas criticas desgarradoras acerca de la actitud de los que le rodean, especialmente de los “entendidos” en la fe judía, que ven que su forma de entender la relación con Dios, la religión, no es aceptada por Él.
Así, crítica a quienes quieren quedar bien, “decorando”, o disimulando o justificando los crímenes contra los justos e inocentes, aunque hayan sido realizados por sus antepasados (les levantan monumentos y mausoleos)
Desde luego que Jesús no tiene la pretensión de desear quedar bien.
A la vez, crítica a aquellos que bajo dar una imagen, cierran la puerta a quienes buscan un sentido a su vida, cierran a la búsqueda de la sabiduría.
Jesús propone a quienes le seguimos su propio ser: la sinceridad, la autenticidad, la franqueza, el encontrar y dar un sentido a porqué estamos aquí. Él vive así.
Descubramos como es, y estemos con Él.
José Luis, vuestro Párroco