Con estas palabras no pretendemos explicar ni suplantar el Evangelio diario, sino dar pautas para contemplar esta lectura, sabiendo que lo fundamental es leer, saborear y gustar internamente el Evangelio, descubriendo más hondamente como es el Señor.
Lunes semana XIV del Tiempo Ordinario. Ciclo A.
Día 11 de julio, San Benito, Abad.
Lecturas: Mt 19, 27-29.
Con frecuencia hablamos de la entrega y la donación de uno mismo, o de abrazar la cruz.
Creo que la vida de fe va por un camino bien distinto. Aunque la renuncia a veces, por amor, tenga que aparecer.
Jesús hoy nos habla de algo que Él vive: lo que entrega al Padre, toda su vida, le es devuelto «cien veces más».
Los místicos y los santos lo tienen muy claro: la vida entregada es vuelta a encontrar, y, además, llena de plenitud.
Caminar en la fe nos puede suponer renuncias, ahora bien, lo que encontramos supera a lo entregado. Y así es.
Hoy el Señor nos llama a caminar sabiendo que lo que vamos a encontrar realmente supera lo que entreguemos, porque poco a poco Dios nos va llenando de plenitud.
Estemos con Él.
José Luis, vuestro Párroco